viernes, 5 de septiembre de 2008

Derecho a la tierra


Sale de sobra decir que los agricultores necesitan tierra para producir los cultivos. Pero es triste que muchos de ellos no tengan derechos seguros a la tierra. Y no sólo a la tierra, sino a todo lo que se relaciona con ella: el agua, los árboles, la vida silvestre, todas las cosas que la población rural necesita para producir alimentos, ganarse la vida y subsistir. En muchos países, especialmente en Asia y América Latina, un número relativamente reducido de personas ricas posee muchas tierras, a la vez que millones de campesinos sin tierras luchan por ganarse la vida y alimentar a sus familias. Al carecer de derechos seguros a la tierra, a menudo se les niega el derecho a los alimentos. Infórmate sobre el derecho a los alimentos.Es más, al no tener propiedades, los agricultores pobres a menudo carecen de servicios públicos básicos, como sanidad y electricidad. Son tratados como ciudadanos de segunda. Esto no sólo es malo para las personas, sino también para el planeta. Cuando los agricultores no tienen derechos seguros a la tierra, tienen pocos motivos para cuidar que los métodos de cultivo que usan sean "sostenibles". Tiene poco sentido trabajar para proteger la tierra para las generaciones futuras. Si la fertilidad de sus tierras se degrada, las abandonan y desbrozan otras tierras de otras personas.

Tierra, tierra, tierra...



"Nosotros siempre decimos que una sola persona tiene casi 45 mil hectáreasy nosotros somos los que mas sufrimos por no tener tierra,yo soy dirigente y no tengo tierra. Acá en 100 hectáreas viven 23 familias…"(Víctor Gómez, dirigente Toba Lote 4, Pampa del Indio, 2008)

Aguantando la seca...Pero Septiembre promete buenas lluvias


"El tiempo que dedicaste a tu rosa hace que tu rosa sea importante" Antoine Saint-Exupéry.




Energias Renovables





MANIFIESTO DE UGT SOBRE LA ENERGÍA
POR UN MODELO ENERGÉTICO ECOSOSTENIBLE Y SOCIALMENTE JUSTO

Los procesos actuales de generación y consumo energético contribuyen notablemente al deterioro del medio ambiente. Además, el 80% del consumo de este recurso corresponde a la cuarta parte de la población que goza de mejores condiciones socioeconómicas. Asimismo, la necesidad de alcanzar mayores cotas de Bienestar Social, teniendo en cuenta la cohesión interterritorial, en el ámbito nacional e internacional, requiere inevitablemente, según el actual modelo, un incremento del consumo energético para el futuro. En este sentido UGT manifiesta:
El cambio de este escenario que además de insostenible es insolidario, exige una reorientación
de las políticas energéticas que se plasme en el desarrollo e implantación de Planes Energéticos que actúan sobre el consumo, impulsando el ahorro y eficiencia energética a través de programas de gestión de la demanda y de mejora tecnológica; sobre los sistemas de generación, diversificando las fuentes de suministro y utilizando procesos menos intensivos en el consumo de recursos no renovables y menos contaminantes.
• Un Plan Energético Nacional orientado a la sostenibilidad, desde la doble óptica
socioeconómica y medioambiental debe contemplar:
• Un marco orientativo que estimule la utilización de energías menos contaminantes y el
ahorro, regulando la eficiencia de los procesos de transformación energética, optimizando
el consumo de los sistemas y aparatos eléctricos, así como la climatización y aislamiento
térmico de viviendas y edificios.
Una Estrategia Nacional de Energías Renovables, dedicando fondos para lograr el desarrollo
tecnológico necesario del sector, especialmente, entre otras, la eólica, solar, biomasa; estableciendo instrumentos fiscales que incentiven una mayor participación de las Energías Renovables en la estructura del suministro; incorporando, entre otros, criterios de climatización e instalación de Energías Renovables en las normas de viviendas de protección oficial y edificios públicos.
En la vista de los problemas que de forma accidental se vienen produciendo en el sector de
generación de energía nuclear y, dadas las dificultades que plantea el tratamiento eficaz de los peligrosos residuos nucleares, consideramos pertinente el abandono progresivo de la energía nuclear en la medida que fuentes energéticas alternativas puedan sustituir este volumen de producción o que las centrales existentes en todo el territorio del Estado vayan agotando su vida útil. En todos los casos, deberán desarrollarse planes de compensación económica para las zonas afectadas con vistas a generar nuevas inversiones que compensaran los efectos de la retirada de este sector energético.
Deben establecerse criterios de política fiscal que sean capaces de reorientar las actuales
tendencias de producción y consumo energético, cambiando gradualmente la configuración del actual mapa energético nacional que muestra un perfil con claros desequilibrios. En este sentido, jugarán un papel determinante las ecotasas, cuyo objetivo no debe ser cumplir una mera función policial del principio quien contamina paga, puesto que, aún pagando, nadie puede comprar el derecho a contaminar a través de una ecotasa. Estos instrumentos fiscales, además de incorporar elementos que garanticen la cohesión social, no deben tener una función recaudatoria y se destinarán a la financiación de mejoras medioambientales o la desgravación del factor trabajo, en beneficio de una mayor generación de empleo.
Las ecotasas deben tener un carácter desincentivador respecto a aquellos sectores energéticos que comportan un mayor deterioro medioambiental y/o un consumo desproporcionado en relación con las necesidades reales.
La reducción del impacto ambiental del transporte exige reorientar los actuales modos y medios
de transporte utilizados hacia fórmulas más eficientes, que no restrinjan la movilidad de los ciudadanos y mercancías, contemplando la reducción de consumos unitarios, fomento del transporte colectivo e impulsar la utilización del ferrocarril de acuerdo con las directrices Europeas.
Condición indispensable para lograr esta reorientación del transporte es la mejora de la
planificación urbanística, tanto de las ciudades como de las zonas industriales, que permita implantar sistemas de transporte colectivo. Algunas experiencias recientes demuestran que pueden obtenerse mejores resultados en la planificación urbanística, ordenación territorial y racionalización del transporte si los agentes implicados forman entes mancomunados y se elaboran estrategias que integren todos los factores actuantes.
Atendiendo al principio de equidad social, es necesario equilibrar las actuales cifras de
consumo/población, actuando con responsabilidad desde las Sociedades más favorecidas, evitando el derroche de energía y transfiriendo medios tecnológicos de generación energética más ecosostenibles hacia los países en vías de desarrollo, de modo que alcancen las mismas cotas de salud y bienestar social que se disfrutan en los países desarrollados.

¿Que es la agricultura urbana?




Es la práctica agrícola y pecuaria en áreas intra y peri urbanas de las ciudades, utilizando el potencial local (fuerza de trabajo, área disponible, agua, residuos, etc.), con la finalidad de generar productos alimenticios y/o no alimenticios de autoconsumo y también destinados al mercado.
Produce diferentes tipos de cultivos y crianzas como alimento, hierbas aromáticas y medicinales, plantas ornamentales, productos derivados de árboles y plantas de semilleros. Incluye la producción de insumos (plántulas, compost, humus), la entrega de servicios (por ejemplo de salud animal), la transformación de productos agrícolas y pecuarios y su comercialización. Se lleva a cabo en terrenos privados (propios o alquilados), en terrenos públicos (parques, áreas de conservación, al lado de caminos, arroyos y de la vía férrea), o en terrenos semipúblicos (patios de colegios, terrenos de colegios y hospitales); por unidades productivas individuales o familiares, empresas grupales o cooperativas, microempresas, empresas pequeñas y medianas, así como empresas de gran escala.

Está integrada al sistema económico y ecológico urbano: usa mano de obra de residentes urbanos y recursos urbanos (residuos orgánicos, aguas residuales), establece vínculos directos con los consumidores y es parte del sistema urbano de alimentos, compite con el uso de tierras destinadas a otras funciones urbanas, tiene impactos directos en la ecología urbana y es influenciada por las políticas y planes urbanos.

Puede ser parte de políticas de seguridad alimentaría o de reducción de la pobreza (con el objetivo de generar ciudades inclusivas y con seguridad alimentaría), de políticas de desarrollo económico local (generar ingresos y empleos para lograr ciudades productivas), o de políticas ambientales integrales (convertir los residuos urbanos en recursos productivos y generar oportunidades recreativas y educativas para lograr ciudades ecológicamente sostenibles).

Fuente: MERZTHAL, Gunther, IPES. Texto Temático: CONCEPTOS Y DEFINICIÓN DE LA AGRICULTURA URBANA (Traducido y adaptado de H. de Zeeuw, ETC-RUAF, “Concepts and definition for urban agriculture” y M. Dubbeling, ETC-RUAF, “Different dimension and policy areas related to urban agricultura”).

Me cagaré de hambre, pero que lindo es mi auto...

Sobre los Biocombustibles.....
El petróleo se acaba. ¿Son realmente una solución a largo plazo? o ¿un paliativo al corto plazo? Hay un problema fundamental con los biocombustibles basados en granos y oleaginosas, se requiere transformar comida en combustible, si, comida, pero a la vez... ¿contaminaría menos? o ¿eso es una falacia? Si un país con extensiones inmensas como Argentina produce biocombustibles para su uso propio, con tan sólo 40 millones de habitantes, puede satisfacer todas sus necesidades energéticas internas sin tocar reserva alguna de petróleo y tocando una porción marginal de la producción de granos, es decir, es fácil para nuestro país tener energía renovable sin necesitar deforestar más de lo que ya se ha hecho. El problema es otro, si Argentina quisiera mantener la demanda del mayor consumidor de combustibles fósiles del mundo, EEUU, tendría que matar de hambre a toda la población local y toda su producción de grano derivarla a biocombustibles, de esa forma sólo podría contener una parte de la demanda. Sumando a todos los países agricultores del tercer mundo y matando al 90% de su población seguiríamos sin poder abastecer a la "bestia" mundial, esa combinación de países que más consumen (EEUU+Europa+China) y menos materia prima exportan (nada), con la consecuencia de la muerte masiva y que, al fin de cuentas, esos mismos países ya tendrán en el mediano plazo otro sistema o recurso que les permitirá prescindir de los biocombustibles. Visto desde ese punto de vista, alarmista, puede sonar simple, pero es mucho más complejo y no por nada surge semejante temor, por alguna razón es.